Angie Bonilla, madre del pequeño Lyan de 11 años, quien fue secuestrado hace 16 días en Jamundí, Valle del Cauca, hizo un desgarrador llamado a las autoridades y al presidente de la República para que intervengan en la pronta liberación de su hijo.
En una entrevista, Bonilla expresó su dolor y angustia por la situación que vive su familia: “Presidente, le pido que me mire con ojos de amor, con ojos de misericordia, que también es padre. Yo solo pido a mi hijo, el perdón ya está”, dijo entre lágrimas.
La madre apeló a la sensibilidad de las autoridades y recordó que su único anhelo es volver a abrazar a Lyan. El caso ha conmocionado a la comunidad de Jamundí, donde vecinos y organizaciones se han unido para exigir la liberación del menor.